Dos personas han fallecido y otras 13 han resultado heridas en un grave accidente de ferrocarril ocurrido en torno a las 12:30 del mediodía en la línea férrea Cáceres-Mérida, cinco kilómetros al norte de la localidad pacense de Carmonita. En el siniestro se han visto implicados un tren de pasajeros y un camión dumper que trabajaba en las obras del AVE. El tren salió de la estación madrileña de Atocha a las 7:41 de la mañana y tenía prevista su llegada a Mérida a las 12:44. En el momento del impacto viajaban en el tren 14 pasajeros, el maquinista y el interventor. Aunque durante el rescate se han suscitado dudas sobre el número exacto de personas que podrían viajar en el convoy.
Las víctimas mortales son dos jóvenes emeritenses, Olga Nuñez, de 19 años, pasajera del tren, y Eduardo Durán, de 25 años, el conductor del camión, según ha informado el alcalde de Mérida, Ángel Calle. Los padres de la chica han acudido hasta el lugar del siniestro, donde han sido atendidos por psicólogos de Cruz Roja Extremadura.
Fuentes sanitarias confirman que 13 heridos han sido trasladados a los hospitales de Mérida, Cáceres y Badajoz. Los otros tres viajeros han resultado ilesos, uno de ellos el interventor.
A Cáceres se trasladó a cuatro personas, miembros de una misma familia, dos niños, su madre y su abuela. En el primer caso, se trata de V. M. M., de tres años de edad, que ha sido intervenido por un trauma abdominal y que ha sido ingresado. Igual suerte ha corrido su hermano, D. M. M., de siete años, que seguirá en el centro con una fractura doble en la mandíbula. También permanecerá ingresada la abuela, M. P. M., de 64 años, con una contusión torácica. La madre de los pequeños, M. J. M. P., de 39 años, ha sufrido una contusión en una pierna y ya ha recibido el alta.
La consejera de Sanidad y Dependencia de la Junta de Extremadura, María Jesús Mejuto, ha confirmado que el niño más pequeño, de tres años, sufre un trauma abdominal y ha sido intervenido a las cinco y media de la tarde. El TAC ha evidenciado que hay «líquido libre», según la consejera, que ha precisado que su situación era estable antes de entrar en el quirófano y que no se puede dar un diagnóstico hasta que concluya la intervención.
Seis heridos han sido dados de alta, ya que sólo han sufrido contusiones y traumatismo leves.
«Un choque casi de refilón»
En el lugar se trabaja para retirar el camión, que había quedado empotrado encima del tren. En el lugar de los hechos, la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, ha explicado que el choque se produjo «casi de refilón», ya que el tren, que circulaba a 100 kilómetros por hora, ha golpeado al vehículo por el lado derecho, resultando accidentados los tres vagones del convoy.
Pereira ha apuntado que el conductor del camión podría haber realizado «una maniobra no permitida», aunque aún no se han confirmado las causas del accidente. Renfe y Adif han iniciado una investigación para conocer las causas del siniestro, aunque han preferido no aventurar ninguna hipótesis hasta no conocer todos los datos.
Numerosas asistencias sanitarias
Hasta el lugar del suceso se han desplazado numerosos medios de socorro, una decena de ambulancias de Cruz Roja, seis del SES, cuatro convencionales y dos de ellas medicalizadas, además de dos helicopteros del 112 con base en Don Benito y Malpartida de Cáceres, además de otros sanitarios de los centro de salud de Carmonita y Cordobilla de Lácara. Las asistencias han tenido que acceder al lugar, el kilómetro 32,600 de la línea férrea, por caminos y terrenos que están siendo allanados por la maquinaria de obra.
Dotaciones de bomberos de los parques de Mérida, Puebla de la Calzada y Cáceres se han ocupado del rescate de los cuerpos, alguno de ellos atrapados en el amasijo de hierros.
Está previsto que esta tarde el ministro de Fomento, José Blanco, comparezca con los máximos responsables de RENFE y del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) en la Delegación del Gobierno, en Badajoz.
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, se ha desplazado hasta la zona del siniestro, donde ha mostrado su pesar por el accidente «que se ha llevado dos vidas» y ha recordado que este tipo de grandes obras son «para el desarrollo, el progreso y la prosperidad», aunque en este caso «se ha quedado gente en el camino».
Para Vara, este tipo de accidentes «no deberían ocurrir y hay que analizar las causas para que no ocurran nuevamente», además de añadir que «parece que las grandes obras deben pagar un peaje en vidas humanas».
Al lugar también se ha desplazado el alcalde de Carmonita, Agustín Guerrero Lima, quien ha lamentado el accidente, y ha aprovechado para reclamar una alternativa para el paso de estos camiones de gran tonelaje en las obras del AVE por las calles del municipio.
En un comunicado de prensa, el presidente del PP de Extremadura, José Antonio Monago, ha trasladado sus condolencias a los familiares de las víctimas del «trágico» accidente ferroviario y ha deseado la pronta recuperación de los heridos. El secretario general del PP de Extremadura, Fernando Manzano, y el vicesecretario de organización, Juan Parejo, también se desplazarán a la localidad de Carmonita para examinar el lugar de los hechos y solidarizarse con las víctimas.
Vía | hoy.es